A los 90 años, murió el gran locutor Cacho Fontana
El histórico conductor y locutor radial Norberto Palese, conocido popularmente por su seudónimo de Jorge «Cacho» Fontana, falleció durante las últimas horas a los 90 años, tan solo un día después de la muerte de su exesposa y madre de sus hijas, la exmodelo, actriz y presentadora Liliana Caldini.
«Nuestras condolencias a familiares y amistades del locutor, conductor y animador Jorge ‘Cacho’ Fontana, abrazándalos en este duro momento. Fue un importante referente de los medios de comunicación del país, conductor de recordados programas como ‘Odol pregunta’ y ‘Videoshow'», escribieron desde la cuenta oficial de Twitter de la Asociación Argentina de Actores, en medio de una ola de repercusiones en redes sociales tras conocerse la noticia.
Fontana se encontraba en un estado de salud delicado luego de haber contraído Covid-19 en 2020 y tras haber estado internado en varias oportunidades por cuadros de neumonía, el último de ellos en mayo en el Hospital Fernández del barrio porteño de Palermo.
En los documentos Norberto Palese, «Cacho» nació en el barrio de Barracas el 23 de abril de 1932 y durante muchos años fue un locutor de voz límpida e inconfundible, icono de los micrófonos desde su debut en radio en 1950 hasta la década de 1990, cuando recibió acusaciones de violencia por parte de una joven aspirante a modelo que lo sumieron en dificultades judiciales por varios años, problemas de salud y una profunda depresión.
Como era habitual en su época, Fontana comenzó como animador en el cabaret Chantecler, en la calle Paraná al 400, cuartel general de la orquesta de Juan D’Arienzo, y también en el café Tango Bar, hasta que dio su salto a la radio como locutor suplente de Julio César Barton (1950) y reemplazó al entonces notorio Jaime Font Saravia como animador de «El relámpago», programa que se desarrollaba en la redacción de un diario.
Entre 1955 y 1966 fue la voz emblemática de Radio El Mundo y transitó infinitas veces el auditorio de la emisora -hoy Radio Nacional- en Maipú 555, lugar al que volvió luego interpretándose a sí mismo junto a Graciela Borges en la película «Pobre mariposa», filmada por Raúl de la Torre en 1986.
Luego ingresó a Rivadavia e integró el equipo de José María Muñoz y Enzo Ardigó que relató el Mundial de Fútbol de Inglaterra de 1966, en el que participó la Argentina y fue el último que se transmitió solo por radio y no por televisión.
Tuvo un éxito singular con «Fontana Show», emitido por Rivadavia, que se transmitió durante más de 15 temporadas y en el que contaba con las reconocibles voces de Rina Morán y María Esther Vignola, un formato de radio desinhibido y espontáneo que cambió para siempre las mañanas de las emisoras.
En TV tuvo un brillante pasaje por «Odol pregunta», que antes había sido conducido por Carlos D’Agostino, Jorge Paz, Blackie y Augusto Bonardo, y donde entre 1963 y 1973 impuso las frases «Minuto Odol en el aire» y «¡Con seguridad!», además de haberle dado la oportunidad de ganar un millón de pesos de entonces al adolescente Claudio María Domínguez, quien concursó sobre mitología griega.
En 1979 fue productor general de Canal 11, entonces estatal, y en 1982, durante la guerra en el Atlántico Sur condujo junto a Pinky el programa «Las 24 horas por Malvinas», por el canal oficial ATC, en el que el público llevó donaciones en dinero, joyas, ropas y otros valores y que en su momento causó no pocas polémicas por el destino de esas mercaderías.
Tras un período de concentración de su actividad en televisión, volvió a Radio Nacional en 1992 y 1993 con su «Fontana Show» y en diciembre de 1999 regresó a FM Ciudad con un espacio dominical titulado «El espectacular de la ciudad», un programa de comentarios, entrevistas y música dedicado al tango.
Durante dos décadas estuvo en pareja con la cantante, actriz y bailarina de tango Beba Bidart, una mujer de fuerte personalidad que le llevaba ocho años y a la que abandonó por la entonces modelo Liliana Caldini, 20 años menor, con quien tuvo a sus hijas Ludmila y Antonella, a las que hay que sumar a Estela, nacida en 1955 de su primer matrimonio.
Su estrella decayó debido a su vínculo con la joven modelo Marcela Tiraboschi, quien lo llevó a los tribunales por varias imputaciones, y si bien intentó regresar a la radio con varios programas e incluso avisos publicitarios para importantes empresas, solo pudo regresar a Radio Nacional en mayo de 2019, a los 87 años, con un programa de variedades y entrevistas.
Fontana pasó sus últimos años en una residencia para adultos mayores y reconoció sin vueltas en más de una oportunidad la estrechez económica a la que se enfrentaba mientras el trabajo se hacía cada vez más escaso.
Además de los recurrentes problemas respiratorios por los que tuvo varias internaciones, en 2019 tuvo que ser hospitalizado tras sufrir una caída en el baño de un restaurante, luego de participar de una entrevista televisiva en la que probablemente hizo el balance más crudo y descarnado de toda su existencia. Allí, entre otras cosas, reconoció sin ninguna reticencia que el alcohol y las drogas lo llevaron al ostracismo en uno de los mejores momentos de su brillante carrera como animador y conductor.
Se hizo acreedor a 14 Premios Martín Fierro otorgados por Aptra -uno a su trayectoria-, un Konex de Platino y el Premio español Ondas.
EL PRESIDENTE DESPIDIÓ A CACHO FONTANA
Alberto Fernández despidió esta tarde al locutor y conductor radial y televisivo a través de un mensaje en su red social Twitter.
«Con profundo dolor lamento el fallecimiento de Cacho Fontana, símbolo de la radio y de la televisión argentina», destaca el tuit del presidente.
«Dueño de una voz única, se convirtió en una estrella de los medios de comunicación de nuestro país. Acompaño a su familia y a quienes lo han querido», agregó el texto de Alberto Fernández en su despedida a Fontana, figura emblemática de la radio y televisión argentinas en las décadas del 60 y el 70.
EL ADIÓS A UN ÍCONO
Dos emblemáticos locutores y animadores de la radio y la TV como Héctor Larrea y Silvio Soldán se lamentaron por el fallecimiento de su colega Jorge “Cacho” Fontana, y destacaron su trayectoria profesional y su calidad personal.
Larrea lo hizo en comunicación telefónica con el ciclo “Radio País”, que se emite de lunes a viernes de 13 a 17 en Radio Nacional y que conducen Federica Pais y Mario Giorgi, donde alabó a “Cacho” y lo calificó como “un hombre muy creativo”.
“Le debo mucho profesionalmente”, indicó el locutor y presentador que puso punto final a su propia y trascendental carrera en los medios en 2020, quien aseguró que los comienzos de Fontana en la radiofonía marcaron un cambio de época.
“Cambia el color de las voces; era la mitad de los 50 cuando él ingresa, (Antonio) Carrizo, el otro grande, había venido en el año 48. Más que un locutor era un artista. Tenía una manera de decir nueva”, lo elogió, y añadió: “Matizaba distinto, tenía colores de voz que no tenía nadie, tenía una manera de frasear diferente”.
De acuerdo con Larrea, “Cacho” también produjo un viraje sobre lo que significaba conducir un programa: “Crea los programas de autor, el ‘Fontana show’ era un invento extraordinario donde el conductor es el que tiene la idea de producción del programa, de la música. Lo hace de ida y de vuelta, todo bajo su mirada. Y Fontana trae un concepto sobre la radiofonía, él levanta la radio. El oyente se deleitaba escuchando a Fontana; por eso alcanzó niveles de audiencia únicos”.
“Era muy lindo tratarlo, era muy divertido, él cultivaba una especialidad: contar buenos chistes que no conocía nadie. A Cacho recordémoslo siempre con una sonrisa”, completó, sobre un aspecto más personal.
👉 #Argenzuela | 📱🗣️ «Cacho era muy gracioso, tenemos que recordarlo de esa manera, era un genio», Héctor Larrea a @rialjorge 📲 https://t.co/ir13n1z8sN pic.twitter.com/GOIytjsFw0
— Radio 10 – AM 710 😷 (@Radio10) July 5, 2022
Por su parte, Soldán expresó sus primeras sensaciones al aire de la señal C5N, en una conexión telefónica en la que aseguró que estaba “angustiado” por la noticia de la muerte de su colega.
“Porque lo quería mucho, aunque esto era una muerte anunciada porque hace bastante tiempo que estaba mal y la cosa se iba agravando”, expresó, en referencia al deteriorado estado de salud que Fontana atravesó en los últimos años.
Sobre cómo lo recordará la historia de los medios de comunicación en el país, Soldán fue categórico: “‘Cacho’ Fontana es un número uno absoluto, indiscutido. Fue el gran locutor que tuvo la radio y que tuvo la televisión”.
“Yo siempre decía que cuando lo ves a ‘Cacho’ hacer un aviso por televisión te dan ganas de salir a comprar el producto que está vendiendo, porque te lo vendía con tanta calidad, tanta clase”, graficó, y sumó: “He hecho muchísimos espectáculos y él no me falló nunca. Gran tipo, lo quise enormemente y lo admiré muchísimo más todavía”.
En tanto, Oscar González Oro, que trabajó con «Cacho» en la radio, aseguró en diálogo con el canal de noticias TN estar «muy conmovido» por la noticia: «Me paraliza, aparecen recuerdos, imágenes, memorias, para mí murió Norberto Palese, que era mucho más que ‘Cacho’ Fontana», dijo.
«Era un amigo, el tipo con el que almorzaba dos veces por semana después de la radio, era con el que compartíamos historias. Era un ser humano, con sus defectos, sus virtudes, un creativo. Un trabajador incansable en su mejor momento, creador de grandes éxitos, un hombre que impuso un estilo de hacer radio en la que de alguna manera abrevamos todos», agregó González Oro.
Además, contó que lo que le atrajo del emblemático locutor fue «su voz, su tono y cómo la manejaba, y su humor»: «Me divertía, me informaba, se tomaba el pelo a sí mismo. Yo escuchaba ‘buenos días’ y sabía que no me había equivocado en el dial, que estaba en Rivadavia escuchando a ‘Cacho’ Fontana», concluyó.
En tanto, Magdalena Ruiz Guiñazú, que compartió años con Fontana en la televisión en Canal 11 con el programa «Videoshow», contó en el mismo canal que se sentía muy apenada por su fallecimiento, «porque trabajar con él fue una aventura maravillosa».
«Constantemente tenía muy buenas iniciativas, tenía una fluidez para la información, una fascinación por la noticia, que a mí siempre me impactó mucho», lo recordó la periodista.
Las redes sociales también fueron utilizadas por algunos colegas y personalidades de los medios para despedirse de «Cacho», como Beto Casella, quien en su cuenta de Twitter publicó: «Se fue Cacho, el inventor de la radio actual. QEPD».
«Se fue el más grande. El que inventó la radio. El que nos daba clases y consejos. El que tenía el elogio siempre a mano para hacernos sentir bien. Chau Cacho», lo despidió por su parte el conductor Jorge Rial; mientras que Eduardo Feinmann recordó «su cariño infinito»: «Te vamos a extrañar. El mejor. Gracias por el afecto y enseñanzas», tuiteó junto a una foto con Fontana.
La última aventura radial de Cacho Fontana fue en 2019 en Radio Nacional
En mayo de 2019 Cacho Fontana empezó a escribir el último capítulo de su legendario andar audiovisual cuando estrenó “Un Cacho de Nacional” por Radio Nacional.
“Tenía ganas de estar entretenido y pensando en otra cosa que no sea la rutina en torno a mi salud y hoy me encuentro disfrutando de esta posibilidad que me brinda Radio Nacional y que me llega en un momento donde extrañaba mucho estar al aire”, señaló entonces Fontana a Télam.
El equipo familiar en torno al envío mensual sumaba a Antonella Fontana, una de sus hijas, al frente de la producción y a su ex esposa, Liliana Caldini (que murió ayer), acompañándolo al aire.
El vínculo de Cacho y Nacional tuvo el 15 de abril de ese año un capítulo especial ya que mereció -junto a Héctor Larrea- un homenaje de la emisora que consistió en la colocación de sendas placas con sus nombres en la entrada del mítico edificio de Maipú 555.
Además de celebrar su regreso a la actividad, Fontana dejó sentencias con su sello como que “la radio es la imaginación y la llave de toda mi vida. Es un medio que se va adaptando y no hay con qué darle. A pesar de las variantes electrónicas y de las nuevas tecnologías que hay. La radio sigue luchando como siguen peleando los barcos contra los submarinos”.
Y acerca de particularidades de su oficio, dijo: “Yo no soy periodista sino que siempre hice reportajes sobre la intimidad del personaje, de su familia, de sus cosas personales y eso me favoreció porque dijeron ‘eso no es periodismo’. Lo comencé a hacer con el presidente de la compañía que me auspiciaba y aparentemente era una pavada pero me doy cuenta que es un modo de preguntar que hoy está en boga”.
Fuente: Telam