Se verían afectados favorablemente 200 empleados, y sus sueldos seguirán siendo los mismos. La experiencia comenzó el 1 de julio y durará dos meses, en catorce filiales de la región.
De esta manera, la compañía se convierte en una de las primeras en esta región en probar los beneficios de las jornadas reducidas de trabajo, al igual que otras multinacionales que obtuvieron resultados positivos en cuanto a productividad, innovación y bienestar de los empleados, según un comunicado de la empresa.
Para asegurar mantener el alto nivel de servicios al cliente, el día libre se rota por persona: para algunos será el viernes y para otros el lunes.
En ese marco, la vicepresidenta de Recursos Humanos de Ricoh Latinoamérica, Lorna Hernández, sostuvo que “este enfoque centrado en las personas impulsa la evolución de varios aspectos de la empresa: espacios digitales y físicos, procesos y cultura, para lograrlo es fundamental una estrecha colaboración entre todos los departamentos del negocio”, precisó Página 12.