Vuelve la serie Sex and the city, el éxito basado en el libro de Candace Bushnell
Tras el anuncio de que habrá una nueva temporada de la exitosa serie «Sex and the city», que fue también adaptada a la pantalla grande en dos oportunidades, la historia de Carrie y sus amigas continuará basada en el libro homónimo de la estadounidense Candace Bushnell, resultado de una columna semi autobiográfica que la autora escribía en los años 90 para el diario New York Observer.
La serie -de diez episodios de media hora cada uno– comenzará a producirse en Nueva York a fines de junio y estará protagonizado por Sarah Jessica Parker (Carrie), Cynthia Nixon (Miranda) y Kristin Davis (Charlotte). Luego del escueto comunicado de HBO los fanáticos no pudieron evitar preguntarse por la la ausencia de una figura clave: el personaje de Samantha Jones. Es que la actriz Kim Cattrall -quien protagonizó las seis temporadas de la serie, de 1998 a 2003, así como las dos películas- se negó a participar otra vez en el programa luego de mantener peleas públicas con Sarah Jessica Parker, por «acaparar» el rol protagónico.
Fue la propia creadora de esta ficción, Candace Bushnell, quien aseguró recientemente a la web de chimentos PageSix.com que la nueva temporada funcionará bien sin Kim Cattrall, o mejor dicho, sin Samantha.
Ya se confirmó que no se creará un nuevo personaje para reemplazarla en la nueva temporada titulada «Y así como si nada», que seguirá a Carrie, Miranda y Charlotte mientras navegan la vida y la amistad desde los 30 años hasta los aún más complicados 50.
El exitosísimo libro «Sex and the city» que vio la luz en 1996 en Estados Unidos fue tan sólo la punta del iceberg de una extensa colección de títulos que alteraron el espíritu de la época: la aparición masiva de novelas escritas y dirigidas a mujeres jóvenes, solteras, trabajadoras, independientes, en escenarios urbanos.
Junto a SATC, el exponente máximo de este fenómeno fue «El diario de Bridget Jones» de Helen Fielding, una serie de títulos que en algún momento alguien se animó a catalogar como «chik lit», literatura para chicas o literatura para ‘pollitas’ en inglés, una clasificación inaceptable en la actualidad, luego de movimientos como el MeToo y Ni una menos.
El gran interrogante es si las protagonistas de la serie -divertidas, empoderadas, independientes, desenfadadas, sí, pero también consumistas, frívolas, poco apegadas a la inclusión y la diversidad- lograrán también adaptar su mirada sobre la vida del siglo venidero.
El libro -que ha inspirado una de las series de televisión más vistas- relata instantáneas de la vida de un grupo de mujeres que toman cócteles en algunos de los bares más exclusivos de Nueva York, usan zapatos de Manolo Blahnik, carteras de Gucci y se la pasan debatiendo sobre el amor y el sexo.
Nace de este libro el popularísimo personaje de la periodista Carrie Bradshaw, de 34 años, enamorada de «Mr. Importante» (en la traducción al español), más conocido como el señor Big, así como la cuarentona y sexual Samantha Jones, o la independiente Miranda Hobbes.
La serie supo colocar a la mujer «moderna» en un lugar novedoso y hablar de sexo sin tapujos, mientras adaptó muchísimas de las anécdotas narradas en el libro.
Con todo, se encontrará en las páginas del volumen referencias constantes utilizadas en la serie, como cuando un grupo de amigas de Manhattan viaja sin ganas a visitar a la que se casó y mudó a los suburbios, o los personajes de los «solteros tóxicos», en medio de una mirada aguda y despiadada sobre un selecto y bastante frívolo grupo social de Nueva York.
La diferencia entre el libro y la serie es que esta última redujo el protagónico a cuatro mujeres, sentó las bases de sendos estereotipos con los que la «espectadora» se sentirá identificada (la mujer fatal, la esperanzada o la inteligente) y profundizó en los sentimientos de cada un de los personajes y sus historias.
«Por primera vez en la historia de Manhattan, hay un montón de mujeres entre 30 y 40 años con tanto dinero y poder como los hombres o, por lo menos, con suficiente dinero y poder para sentir que no los necesitan salvo para el sexo. Esta novedosa situación alimenta muchas conversaciones», describía la autora por aquel entonces.
La galería de personajes inolvidables incluye al amigo gay de Carrie, Stanford Blatch, un guionista de 37 años, pero además propone un enamoramiento con la ciudad de Nueva York, otra protagonista más, ya que es escenario permanente de casi toda la narración.
Luego del éxito de SATC, Candace Bushnell se dedicó por completo a la escritura de libros con exitosos títulos como «Lipstick Jungle», «Cuatro rubias», «Quinta avenida» y «Los diarios de Carrie», una precuela de Sex and the City que narra la juventud del famosísimo personaje Carrie Bradshaw.