El gobernador promulgó la ley que otorga créditos blandos y exenciones en los ingresos brutos
El objetivo de la legislación del plan de reactivación económica, es entregar créditos de hasta un millón de pesos, y por otro lado, eximir del pago del Impuesto sobre los Ingresos Brutos a los grandes contribuyentes que realicen inversiones, y a los contribuyentes más pequeños -contribuyentes directos- que hayan disminuido sus ingresos en más de un 20%, si se compara lo declarado en 2019 en relación con el 2020.
El proyecto está destinado a quienes realicen inversiones que aumenten su capacidad productiva y/o generen nuevos puestos de trabajo. El monto de la exención no podrá superar el 50% del impuesto declarado por el contribuyente, considerando los dos últimos ejercicios fiscales vencidos, el que fuere mayor; o hasta el monto de la inversión productiva aprobada, en el caso de que esta sea inferior al porcentaje establecido anteriormente.
También tiene por objeto eximir del pago del Impuesto sobre los Ingresos Brutos a los contribuyentes que revistan la calidad de directos, cuyos ingresos anuales declarados en el periodo fiscal 2020; sean gravados, no gravados o exentos y sin considerar la incidencia del Impuesto al Valor Agregado (IVA); no superen la suma de $ 29.000.000,00.
Podrán acceder al beneficio los contribuyentes antes detallados, cuyas Bases Imponibles para el período fiscal 2020 respecto de 2019, declaradas con anterioridad al 30 de junio de 2021, se hayan visto disminuidas en un importe no menor al 20% en términos reales.
El proyecto de ley de los créditos blandos y beneficios impositivos, fue presentado por el gobernador, Alberto Rodríguez Saá, durante su mensaje el 1º de abril en la Legislatura provincial, y fue explicado por la jefa de Gabinete de Ministros, Natalia Zabala Chacur, en la última exposición del informe de gestión.
Fuente: ANSL