El desempleo sería del 15% si no hubiese bajado la Población Económicamente Activa
El desempleo del 11% registrado en el segundo semestre de 2020 sería del 15% si se hubiese mantenido sin cambios la Población Económicamente Activa (PEA), ya que las estadísticas no reflejan a las personas que se retiran del mercado laboral y dejan de buscar trabajo.
“La tasa de desempleo no siempre es un buen indicador, debido a que para su cálculo se tiene en cuenta únicamente a la población económicamente activa (PEA) y no a la población total”, señaló al respecto la consultora Invecq.
En ese sentido, indicó que “si en una coyuntura de caída del empleo se da simultáneamente una caída de la PEA, muchos trabajadores que pierden su ocupación no estarán contabilizados como desocupados sino como inactivos”.
“En gran medida es este factor el que explica que con una destrucción de 800.000 empleos entre finales de 2019 y 2020, la tasa de desempleo haya cerrado en el 11%, una ratio que no luce tan alarmante” en comparación con el 11,7% del tercer trimestre y del 13,1% del segundo.
Invecq precisó que en el último trimestre de 2019 la tasa de ocupación total de Argentina se ubicaba en el 43%, superior al 40,1% del mismo período de 2020.
“Ciertamente, hacia mitad del año la tasa de empleo había alcanzado valores mucho más bajos (33,4% en el segundo trimestre) por lo que los últimos meses fueron de recuperación de mucho empleo que se había perdido en el momento más duro de la cuarentena”, una mejora que “no pudo evitar que entre finales del 2019 y finales del 2020 se hayan perdido unos 800.000 empleos, más del 4% del total”, advirtió.
La entidad dirigida por Esteban Domecq puntualizó en su análisis que su apreciación sobre el “desempleo real” no es una crítica al Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) ni una sugerencia de una supuesta manipulación, ya que los datos oficiales se corresponden con una metodología internacional.
Más allá de esa aclaración, remarcó que el desempleo hubiera sido mucho mayor si se tomara en cuenta a la población total y no solamente la PEA.
Asimismo, Invecq señaló otros tres elementos que no deben excluirse de un análisis completo de la situación laboral:
. A la caída del 4% en el total de empleo hay que complementarla con el crecimiento del subempleo, que pasó del 14% en el cuarto trimestre de 2019 al 17% en el mismo período del año pasado. En el mismo lapso, los ocupados plenos descendieron desde aproximadamente 15,8 millones a 13,9 millones. “Es decir que hubo una caída de 11,5% equivalente a 1,8 millones de ocupados plenos perdidos”, explicó, ya que “un millón pasó a estar subocupado y 0,8 millones a no estar ocupados”.
. Los datos del INDEC son trimestrales, pero “los datos mensuales del Ministerio de Trabajo (que mira solo el empleo registrado, por eso es incompleto) lucen más preocupantes”, en tanto indican que “la dinámica entre septiembre y diciembre fue negativa para todas las formas de empleo privado registrado”.
“Esto podría indicar que la recuperación trimestral que señala el INDEC se estaría debilitando y hasta revirtiendo en los últimos meses del año 2020 y principios del 2021”, agregó, al tiempo que alerto que “el regreso de medidas restrictivas en el futuro cercano obviamente agravaría la situación”.
. A la pérdida de empleo se suma en los últimos meses la caída del salario real. “La combinación de ambas variables garantiza que la situación social permanezca en un complejo escenario, lo que se traduce en una tasa de pobreza que seguirá firme por encima del 40%”, finalizó.